Cáncer de próstata

La intervención temprana evita el progreso del cáncer de próstata


El cáncer de próstata es una de las enfermedades más comunes en la actualidad. Tristemente es la razón del fallecimiento de muchos hombres. Aunque es un tipo de cáncer que se puede prevenir y tratar, hay algunos que le restan importancia a este asunto. El no prestar atención a una posible aparición de cáncer en la próstata es lo que ha llevado a muchos a sufrir de ella. Es importante destacar que si el problema no se trata a tiempo, los riesgos de gravedad podrían aumentar.

El cáncer de próstata

Tal como su nombre lo indica, esta enfermedad se forma en la próstata. La próstata es una pequeña glándula que tiene la forma de una nuez y se encuentra en el cuerpo de los hombres. Dicha glándula es la encargada de producir el líquido que nutre y transporta el esperma. Cuando el cáncer aparece, es necesario ponerse manos a la obra y empezar con el tratamiento médico, pues así será mucho más probable el éxito y la cura.

La clave para evitar el progreso del cáncer de próstata

La clave principal para evitar el progreso de esta enfermedad consiste en la pronta intervención. Hacerlo de manera inmediata ha logrado prolongar la vida de cientos de pacientes. Desafortunadamente en muchos países de Latinoamérica el diagnóstico de la enfermedad suele darse en estado avanzado, reduciendo así las posibilidades de ofrecer ayuda.

Aunque generalmente el cáncer de próstata se presenta en adultos mayores de 60 años, no siempre es el caso. Lo decimos por el hecho de que en ocasiones el riesgo de sufrir esta patología puede relacionarse con antecedentes familiares. Por esa razón, es importante concientizar a la población masculina a que vea la importancia de realizarse un chequeo médico frecuente.

Una enfermedad silenciosa

El cáncer de próstata no presenta síntomas visibles en su etapa inicial, por eso es más difícil que un paciente sospeche de su aparición. Esto ha llevado a que más del 70% de los casos sean diagnosticados en etapa avanzada. Sin embargo, hay que resaltar que existe la posibilidad de identificar en algunos casos que hay un problema.

Algunos de los síntomas visibles son los siguientes:

  • Dificultad para orinar o la sensación de dolor o irritación. 
  • Goteo o presencia de sangre en la orina.
  • Disfunción eréctil.
  • Dolor en la cadera.
  • Debilidad y fatiga.